Hace cincuenta años, las Hermanas Justa de Sol, Pura Gonzalez, Mª Cruz Eraso, Gema Palacios y Mª Angeles Ilzarbe hacíamos nuestra primera profesión en Pamplona, rebosantes de alegría, y entrega confiada en el seguimiento a Jesús. Eran años de plena renovación conciliar.
Celebramos pues las BODAS DE ORO e iniciamos el año jubilar.
Sobra decir que el coronavirus también ha afectado alguna actividad celebrativa, pero a la vez ha posibilitado encontrarnos virtualmente como grupo y ampliado con Ana Barandiarán (toca el año que viene, es sola).
El 1 de junio, ha sido un día especialmente de celebración. Por una parte cada una en su respectiva comunidad, la oración de la mañana es momento de hacer memoria agradecida de la historia vocacional, sentirnos cuerpo congregacional y renovar el SÍ en la certeza de que El conduce nuestra historia.
El encuentro virtual en ambiente de fiesta, compartimos la alegría de encontrarnos, la vivencia de cada una en la oración de comunidad, cómo hemos vivido estos meses de confinamiento y la rica experiencia de Misión en camino con las mujeres, las hermanas y la familia Oblata. Nuestra mirada hacia el futuro es continuar comprometidas en caminar hacia el Nuevo horizonte, desde la certeza de que “Jesús y las mujeres nos indican el camino…”
Nos recreamos trayendo a la memoria los años de noviciado y juniorado, en los que el canto: “Nosotros venceremos” tenía mucho sentido. Por eso cerramos el encuentro cantando: 1 Nosotros venceremos, sobre el odio con amor, algún día será, Cristo venció, nosotras venceremos. 2 Y seremos libres, y seremos libres. No tiene cadenas el amor, viviremos en paz. Cristo venció, nosotras venceremos.
