En el Centro da Muller Vagalume, en Santiago de Compostela, celebramos el día 8 de marzo, dedicado a la Mujer Trabajadora, de una forma muy especial….
La artista y trabajadora social Cristina Castro realizó una exposición fotográfica presentando su proyecto artístico “Cores de Muller”, que como ocurre con las diferentes gamas de colores, muestra la belleza y riqueza que hay en la diversidad cultural y en las diferentes identidades femeninas, resaltando el potenciar que lo diferente no conlleve a lo desigual.
Identifica su arte como arte social ya que busca sensibilizar, transmitir un mensaje es una pintura conceptual donde se abordan temáticas como el no al maltrato, no al racismo, sí a la igualdad, respeto a la naturaleza, solidaridad, donde términos como el empoderamiento de la mujer y la sororidad están presentes.
Donde se muestran las diferentes identidades creadas en procesos de socialización diferencial, proyectando sobre nosotras modelos y costumbres culturales de lo que se espera, pero esas identidades que las mujeres representamos no son biológicas sino construidas y al igual que una de las pinturas invitando a las mujeres a volar y tomar el control de sus vidas.
Cree que el arte no se debe alejar de su esencia, como ocurre en el arte contemporáneo convirtiéndose en sistemas de producción, el arte tiene un gran potencial para transformar nuestras percepciones, nuestro entorno, trabajar con las emociones, sensibilizarnos y lo más importante conectarnos con nosotros mismos, tomar consciencia de quien somos y que queremos, en estos tiempos en que la humanidad vive una gran crisis de valores y donde la gente esta dejando de ser gente.
Por eso señalamos como positivo el evento, porque se pudieron compartir emociones y abrazos.
