Desde San Benedetto del Tronto ITALIA, compartimos la experiencia de Comunidad de VIDA que hemos vivido las hermanas y el equipo de trabajo en el Proyecto CASA IRENE y LABORATORIO DI FRONTIERA junto a Chelilú, Religiosa del Sagrado Corazón de México D F.
COMPARTIENDO DESDE LO INTER
En este mes de trabajar como voluntaria extranjera he podido aprender y experimentar una propuesta de cambio e inclusión social que construye Gobernanza para la cohesión social, es decir un trabajo que desde lo cotidiano forma redes con diferentes instituciones gubernamentales, asociaciones civiles, ciudadanía (vecinos) etc… e interactúa con una intervención de inclusión social.
Desde mi Carisma como Religiosa del Sagrado Corazón “Glorificar al Corazón de Jesús en un mundo herido por el pecado “y desde mi misión en la Iglesia a través de la educación, concretamente desde mi ser educadora popular, he vivido esta experiencia que sin duda ha sido una experiencia de crecimiento en comunidad junto a otras mujeres que buscan alcanzar un sueño, plantearse un nuevo proyecto de vida.
Vivir la vida sencilla y cotidiana de “Casa Irene” me ha permitido darme cuenta que hay mucho que hacer para desde un compromiso concreto y profesional ofrecer un espacio de contención que abre posibilidades de nuevas relacione y convivencia para crecer y formarse como personas.
Agradezco a las hermanas Oblatas, a On The Road y a cada uno de los educadores de “Casa Irene” la oportunidad que me brindaron para realizar esta experiencia, gracias por su acogida fraterna, por su apertura y arriesgar el abrir su vida para construir caminos de esperanza junto con otros y otras en un mundo que grita y clama…
Gracias a cada una de las mujeres que viven en “Casa Irene” pues al permitirme compartir la vida con ustedes descubro el corazón humano de nuestro Dios Madre Padre e inspiran en mi corazón la llamada a:
” Descalzarme pues el lugar que piso es tierra Sagrada”…
Un abrazo con cariño y agradecimiento
Chelilú rscj