EL encuentro me suena a destellos de luz, nutridos y amasados: por la fraternidad, silenció, oración reflexión, contemplación, alabanza; vivido, compartido y celebrado por todos.
Inicio esta escuela Pascual: dando gracias, a Dios Padre, Bueno y Misericordioso.
Descubro la Bondad y la Misericordia del Padre en mi vida; que me ayuda a reconocer mi debilidad y sentir su abrazo amoroso a través de mis hermanos.
Jesús me saluda con su paz y me envía a ser anunciadora de lo que he visto y oído.
Lo experimentado me conduce a estar en sintonía, a ser testigo de:
JESUS RESUCITADO ALELUYA
Gracias al equipo: por su gran generosidad, entrega, esfuerzo, dedicación y la posibilidad de ofrecernos la Pascua llena de armonía, contento y gozo.
El grupo: una gran familia, donde se vive y se comparte con sencillez nuestras vidas.
