Querida Familia Oblata,
Os saludo con cariño y os invito a unirnos en oración por la salud del Papa Francisco, que tanto ha inspirado a la Iglesia con su cercanía a las personas más vulnerables y su testimonio de amor incondicional. Su llamada constante a una Iglesia en salida, cercana a los márgenes, resuena profundamente en nuestra misión oblata.
El Papa Francisco, una voz incansable en la defensa de la dignidad de cada ser humano, está pasando por dificultades en su salud. Como comunidad de fe, queremos sostenerlo con nuestra oración y cercanía, pidiendo al Dios de la Vida que le conceda fortaleza, consuelo y una pronta recuperación.
Os animo a que, en nuestras familias, comunidades, proyectos y espacios de encuentro, dediquemos un tiempo especial para unirnos a esta intención.
Que María, Madre del Redentor, y nuestra fundadora Antonia María de Oviedo, intercedan por el Papa Francisco y por toda la Iglesia, para que permanezcamos firmes en nuestra vocación de servicio y acogida.
Con cariño y esperanza,
Carmen Ortega, Superiora Provincial
Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor